los domingos son,
y perdon al cura,
pero son,
y perdon a los que sufren,
pero son,
y perdon a los que aman,
pero son,
con perdon a todos los que quise alguna vez,
lo mejor para perder el tiempo.

el viento a mi lado,
va empujando tempestades

para no extrañarme más
llenaste tu cama
de desconocidos
con buenas intenciones

yo pensé que tenia
la exclusiva de tu vida
y al final
fui un blog más
levantando tarde la noticia

y caigo de rodillas
compartiendo lo obtenido
me miran sorprendidos
no saben el sufrimiento
que me han causado.
pero sigo arrodillado
y pido con los ojos
lo que me negaron.

casi tan estupido
como hacerlo en persona
con la sensacion en la garganta
casi bronca, casi llanto